lunes, 2 de mayo de 2016

Método Científico para charlatanes y mercachifles

Estoy un poco harto de mensajes y propuestas en las que se me ofrece un método, técnica o mecanismo para resolverlo todo. Desde problemas de salud hasta problemas de amor. Pero, he aquí, que yo soy incrédulo por naturaleza y que, si quieres que me crea algo, tiene que venir etiquetado con el beneplácito del Método Científico. Así que, para aquellos que repiten y reiteran aquello de "a mí me funcionó", les propongo jugar al principio irrenunciable de la repetibilidad del Método. Es sencillo, provócate un cáncer terminal (por segunda vez si es necesario) y cuando los médicos certifiquen que te quedan dos telediarios empieza a aplicar esa técnica que tanto avalas. Si sobrevives y has eliminado cualquier traza del mal, y solo entonces, me pensaré que tu método tal vez sirva. Hasta entonces déja de tocármelos y busca algo productivo que hacer. Y si no se te ocurre nada productivo que mejore la especie, recuerda que siempre puedes servir de abono para las plantas.