viernes, 12 de junio de 2009

Se me fastidió la excusa con 'Journeyman'

Las películas y series de ciencia ficción me atraen como la luz incandescente a una polilla. Prefiero este símil al de la mosca y la mierda, aunque dada la calidad de la serie que toca hoy bien podría haberlo empleado. Así que no es raro que, cuando leí la sinopsis de 'Journeyman' dentro del catálogo ofertado por mi camello, no lo dudé dos veces. Sé que siempre digo que aquellos que se acercan a las mafias del P2P son lo peor, más bajo y rastrero que ha dado nuestra sociedad, pero en mis trabajos de investigación he desarrollado adicción y ahora debo vivir como otro marginado social. Me siento sucio por ello.

Tenía planeado usar esta serie de televisión para escaquearme otro fin de semana de mis deberes domésticos. Pero tras tragarme los dos primeros episodios, y abandonar hastiado a la mitad el tercero, me parece que la cosa no pinta nada bien. Y no soy tan masoquista como para comer cualquier cosa por el simple hecho de comer. Tampoco tengo la excusa de las elecciones europeas del fin de semana pasado, y su jornada de reflexión (o su jornada posterior para comentar los resultados), ni un maratón fotográfico al que desee acudir, por lo que lamentablemente tocará armarme con la aspiradora y limpiar en rincones de mi piso donde hace mucho tiempo que no pongo la vista. Hace tiempo que de esos rincones salen sonidos extraños y aventurarse a limpiar en ellos puede acabar muy mal. Al menos para mí. La limpieza en mi casa es un deporte de riesgo.

Que la calidad de una serie (o de una película) no la garantiza el reparto, es algo que sabemos todos, pero tras disfrutar con la actuación que hizo en 'Roma', creí que sería un aliciente para tragarme el segundo capítulo, e intentarlo nuevamente con el tercero, tras un soporífero episodio piloto. Pero se hace extraño ver a un desorientado Lucio Voreno saltando constantemente en el tiempo. Es lo que tiene asociar una cara con un personaje. Esperaba que de un momento a otro se encasquetase el casco de centurión, se armase de una espada y gritase un "¡Por Romaaaaaa!" en mitad de uno de los saltos temporales.

En fin. Aunque la intención era buena, y la historia podía haber dado para más, lo cierto es que, sin ser una basura, es aburrida y eso, a la larga, es casi peor. Al menos, si hubiese sido rematadamente mala te hubieses dicho, bueno, no da para más. Pero con 'Journeyman' te queda el sabor amargo de saber que se podría haber hecho un poquito más para aprobar. Como el suspender con un 4,9. Por una décima te quedas en la calle. Y siempre está ahí la duda de que tal vez el próximo capítulo hubise sido mejor, si le hubieses dado una oportunidad. Pero lo peor es que a mí me ha fastidiado el fin de semana. No podré disfrutar de mis (in)merecidas tardes de sofá.

4 comentarios:

sulaco dijo...

Sácate pero que ya la tercera temporada (o mini serie) de Torchwood. ES LA HOSTIA. Aquellos que no la vean seguro que acaban viviendo en Vecindario, chiflados y tocando moleskines.

Uno+Cero dijo...

Antes me veo todas las series del universo universal que acabar viviendo en Vecindario :-)

No tenía constancia de que hubiese aparecido la tercera temporada de esta magnífica y maravillo serie que debería ser de visionado obligatorio en colegios y guarderías. Seguro que las generaciones venideras serían mejores personas.

Gracias por el aviso.

sulaco dijo...

La tercera temporada son solo cinco episodios de una hora que dieron en cinco días consecutivos y que tratan una historia. Si en una escala de uno a cien Battlestar Galáctica es un 110, en la misma escala esa tercera temporada es un 180.

Uno+Cero dijo...

Localizada y en proceso de adquisición. Esperaré ávido su llegada. Gracias por el aviso.